Contenido

Caridad nunca me desampara

Vamos con la parte 2 de la odisea en Miami.  Antes de seguir, voy a echar para atrás un poquito, porque se me quedaron dos detalles por fuera que luego me acordé.  Uno fue lo que según Yeyo fue el mejor café que se ha tomado en su vida, y fue en la sala de urgencias del Jackson Memorial.  Estaba ya amaneciendo y una enfermera, termo en mano ofrecía café a todos los presentes, vertiéndolo en los vasitos desechables donde te dan las medicinas.  Era esta tintura de café cubano cargado en azúcar, capaz de levantar a un muerto de la tumba.

 

La otra anécdota tiene que ver con Caridad, es decir la Virgen de la Caridad del Cobre.  Ustedes puede que no me crean o dirán que ahora si me ponché, pero para mí esta experiencia fue tan real y tangible como esta computadora en la que escribo.  Antes de despertarme de la cirugía o durante la cirugía, no lo sé, yo la ví parada al lado de mi cama y me habló sin hablar.  Simplemente me dijo, “mi niña, tú eres mía y yo soy tuya, todo va a salir bien”.  Jamás lo olvidaré y si ya tenía una conexión con ella desde hacía mucho tiempo, ahora era inquebrantable.  Corte comercial, su fiesta es ahora el 8 de septiembre.

 

Ahora sí, continúo.  Tenía que permanecer una semana en el hospital y los primeros días fueron supremamente incómodos.  Además, era una habitación compartida y mi compañera de cuarto no estaba muy bien, por decir lo menos.  Hablaba horas por teléfono, lloraba, se quejaba, sin importar si era de noche o de día.  Le habían amputado ambas piernas y en lugar de rodillas tenía hileras de clips metálicos.  Impresionante.  No sé qué le pasó, solo entendía que tenía tiempo de estar hospitalizada y no era pronta su salida.

 

Armando me acompañaba y a mí me extrañaba la ausencia de Yeyo, más aún cuando no me daban una respuesta concreta.  Resulta ser que…ya un amigo nos había prestado un apartamento para pasar mi convalecencia.  El dueño justo había estado ahí con su familia y dado las instrucciones pertinentes para nuestro ingreso en el condominio.  Solo que un día después llama a Yeyo para decirle que casi todos los que habían estado alojados ahí estaban positivos del COVID.  Esto era el 2022, así que el virus estaba bastante presente todavía.  Caos, crisis, auxilio.  Había que sanitizar toda la casa para yo poder entrar.  Ginette nos recomendó una señora y con Yeyo voltearon el apartamento al revés.  Corte comercial, el apartamento era un espacio congelado en el tiempo, pienso yo que en los 80`s, muy cómodo y con linda vista.  Fue mi hogar por más de tres semanas y estaré eternamente agradecida con sus propietarios.

 

Luego de cinco días pude comer algo finalmente, así que las cosas iban volviendo a la normalidad y llegó el momento de salir.  En esta etapa todavía mi área abdominal era como ajena a mí.  Me tenía que mover diferente, me daba un poco de miedo comer cualquier cosa y me tocaba solamente dejar que pasara el tiempo.  Debía ir a revisión cada semana y todo avanzaba perfectamente.  A lo que nunca me pude acostumbrar, fue la línea de 23 clips que me hacían parecer un pavo relleno.

 

Poco a poco hacía cortas salidas, recibí visitas, inclusive mis hijos viajaron desde Panamá a verme un fin de semana.  Era como un paso a la vez, porque me cansaba demasiado y me daba mucho miedo también como salir al sol luego de haber estado tanto tiempo encerrada.  No recuerdo quien, me llevó un ramo de girasoles.  Casualmente, la flor con que se hace homenaje a Caridad.  Esto no fue por coincidencia, era ella diciéndome que seguía conmigo donde yo fuera.

 

Ya llegando al final de mi estadía, salimos a cenar con unos queridos amigos que casualmente estaban de viaje por esos lares y yo me sentía rara.  Como diría un querido vecino, “siento como un bimbi”.   Adivinen qué era el bimbi….

 

Dos días después ya nos regresábamos luego de nuestro mes de exilio forzado, con la aprobación de mis médicos, pero con los clips todavía en su sitio.  Pensé que iba a pitar en la máquina del aeropuerto, pero no.  Estando allí, me empezaron los escalofríos al punto que me tuve que comprar una sudadera antes de abordar.

 

Ya en Panamá me tomo la temperatura, casi cuarenta grados.  Y la vocecita que me susurra al oído me dijo, “mana, tienes COVID”.  Para comprobar, me hice la prueba casera y efectivamente, eso era. Pasé unos cinco días en permanente posición horizontal, hasta que vi la luz junto a un Yeyo que sucumbió dos días después que yo.  Por supuesto, que la sacada de los clips había quedado completamente pospuesta hasta segunda orden.  Yo en verdad medio aliviada ya que tenía pánico a que me los quitaran, tanto porque se me fueran a regar las tripas como porque me iba a doler con cojones.

 

Les puedo confirmar que no pasó ni una cosa ni la otra.  Hoy por hoy, me miro y con asombro puedo constatar que la herida casi no se ve y se ha achicado de forma considerable.  Hay aspectos en mi sistema que han mejorado, otros que han ido en retroceso, pero en balance todo ha sido bueno.

 

Para terminar, esta historia es un ejemplo de varias cosas.  Cómo tus ángeles terrenales acuden a tu auxilio cuando más los necesitas, el apoyo y la compañía de tu familia es lo más preciado en tu vida y que Caridad (o quien tu decidas) no te deja solo ni a sol ni a sombra.

“Me encantaría conocer tu opinión. Sígueme en @maricelescribe y mándame un mensaje directo, ¡te responderé personalmente!”

Compartir en Redes Sociales
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

¡Te invitamos a suscribirte a nuestro newsletter semanal!

Mantente al día con nuestras últimas novedades, consejos exclusivos y contenido especial directamente en tu bandeja de entrada.

Otras Entradas

Marco Antonio, hemos terminado

Esta es una historia totalmente ficticia, pero en la cual expreso mi opinión sobre la visita de Marco Rublio a Panamá y algunos detalles del antes y después. Escribiéndola me di cuenta cómo tantas veces…

Como una concha

Todos hemos pasado por esto. Cuando sentimos, entre otras cosas, que se nos va a rayar el disco duro, entramos en modo enconchamiento. Nos ponemos la coraza para proteger nuestros pensamientos y sentimientos y esperar…

Presidente Mulino anuncia conferencias de prensa semanales

Estas son las noticias que nos alegran el día como profesionales de las relaciones públicas……